viernes, 30 de abril de 2010

acerca de la belleza

Por mi mente pasa un extraño pensamiento y es que últimamente me doy cuenta, que le damos tanto peso a la belleza o al poder económico que a veces me pregunto que acaso la gente que no tiene una bella cara, un cuerpo deseable o una cartera gruesa, carece de oportunidades para ser admirada o deseada por algo más que lo que proyecta su físico o sus posesiones. En mi caso particular, yo trato de cuidar mi aspecto físico, no lo sé ejercicio, no tomar cosas dulces en exceso o abusar del gran placer que es comer y adaptarme a la necesidad social de proyectar una imagen de persona no tan despelucada(como diría mi madre jeje), pero mi verdadera pregunta es, ¿donde compro la belleza? ¿Dónde adquiero la belleza? La compro en el salón de belleza con un bonito trabajo de hojalatería y pintura, la compro en una tienda de marca donde la ropa cuesta la mitad del salario por pieza, la compro con un automotor lustroso invitador de riqueza material o donde la adquiero? El asunto principal de este post es que nos preguntemos hasta qué punto la porquería social define nuestras vidas y les da forma, algunos me dirán “yo no me guio por lo que dice la sociedad” pero todos sabemos que si vives en este mundo te adaptas a él. Así que alguien que me diga, a donde corremos?

1 comentario:

  1. ahi, es donde puedo decirte que tienes mucha razón en muchas cosas, sin embargo, habria que poner en práctica algo llamado observación, para ver un poco más allá de lo que se ve superficialmente y con ello se aprendería a distinguir la verdadera belleza.

    le mando un abrazo

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